Comentario
Una de las grandes realizaciones de los antiguos egipcios fue la inmensa labor artesana, en la que se ocupó una gran parte de su población, logrando innumerables productos de muy bella factura. Gran parte de los artesanos trabajaban para el faraón o los grandes templos, conociéndose documentación sobre la existencia de amplios talleres, donde el trabajo era supervisado por un superintendente. Este cargo era habitualmente hereditario y tenía la misión de controlar la labor de los artesanos y el uso de los materiales que tenían destinados, especialmente los metales. Carpinteros, metalúrgicos, joyeros, ceramistas, escultores, pintores, vidrieros, tejedores, albañiles nos han dejado un buen número de piezas que hacen alusión a la importancia de la artesanía en la época, realizando tanto objetos suntuosos como de primera necesidad. Los textos hacen referencia a la jornada laboral y parece que trabajarían unas ocho horas diarias, durante ocho días de cada diez.